ROZAMIENTO EN EL HUESO: ESPOLON LUNATICO+FULGENCIO Y VIA RODOLFO


Visita expres al señor Nieto para que me lleve de paseo por sus jardines.

Desde que se mudó a Madrid, Oscar se ha convertido en un experto pedricero recorriendo las clásicas, las difíciles, las raras, las expuestas, las musgosas, las excelentes... y cuanto más conoce más se da cuenta de la grandiosidad de la Pedriza.

Le llamo para encajar un día que me queda suelto por Madrid y le pido dos platos del menú.

De plato principal la Fulgencio entrando por el Espolón Lunático, una superclásica con una variante solo apta para auténticos pedriceros.

De postre le pido la vía Rodolfo también en el Hueso, que tiene la virtud de salir en el libro Verticualidad y que el señor Nieto no sabe de su existencia, tirando de guía una breve referencia indicando un popular grado de V, su total desequipamiento y que pueden ser utiles friends grandes es la escueta información obtenida, bueno eso y que en el libro Verticualidad le da de grado obligado IV+, pan comido para unos escaladores tan buenos, guapos y simpáticos como nosotros.

Al plato principal se apunta Olga y del postre pasa, que engorda.

Para el Espolón Lunático no hay elección, Oscar tiene que ir de primero.

La primera chapa no parece estar lejos y más abajo no tendría mucho sentido y sin embargo es endiabladamente difícil el arranque del espolón. En su día picaron algún canto pero lo volvieron a rellenar con lo cual hay lo que hay.



Espolón Lunático saliendo de la segunda chapa
Antes de chapar la segunda si fallas picarías suelo o casi y parecido le ocurre cuando te acercas a la tercera. Con lo cual hay que tenerlo claro y controlar bien las placas pedriceras y el asegurador ha de estar atento por si ha de salir corriendo hacia atrás en caso de caída.



Espolón Lunático a punto de chapar la tercera
Concentrado y controlando Oscar resuelve el largo con maestría, le seguimos Olga y yo con la cuerda bien tensita y mientras escalo y le recuerdo que recupere en cuanto la cuerda no está en modo violín le voy  lanzando piropos a Oscar por lo bien que ha resuelto este difícil largo.

El resto de la Fulgencio es una vía de calidad que sigue un recorrido espectacular por encima de "la pata de jamón" y unos muros de calidad y disfrutones.


En "la pata de jamón"





Espectacular recorrido, no hay que perdérselo.


Ultimo largo de la Fulgencio




Rapelamos y Olga pasa del postre y se queda al sol.


Rapelando por debajo de "la pata"



El perfil de la Fulgencio


Yo presiono para terminar los deberes, Rodolfo ha de ser una vía rápida y sencilla, IV+ obligado, va a ser una disfrutada.

De friends llevamos de camalot un cinco antiguo (casi el seis), un cuatro y medio, un cuatro y de ahí el juego completo estandar de friends doblando alguno y algunos microfriends.

Son tres largos y se pide empezar Oscar.

Primer largo tiene algún pasito de coger la postura dificil que ya será V+ y se protege más o menos bien. Monta reunión en una piedra empotrada y me avisa desde abajo que lo que sigue pinta divertido...

Alcanzo la R y miro para arriba... no digo nada ¿para qué? soy yo el que se ha empeñado en hacer esta vía.



Llegando a la R1. Se ve él único seguro de la vía, una chincheta para colgar cuadros.
Sin saber medir la dificultad de lo que viene lo que parece evidente es que va a ser muy difícil protegerlo con los friends que llevamos. Por delante unos treinta metros de fisura chimenea con los bordes lisos y la boca del tamaño adecuado para que no sirva para nada, ni proteges ni te puedes meter dentro.

La esperanza es que luego aparezcan posibilidades de protegerse o que no sea muy difícil o yo que sé, mejor no pensar mucho y tirar para delante.

Nos lo tomamos con humor, no queda otra y empiezo a darle. Los movimientos son siempre los mismos pies a la izquierda haciendo presión sobre las que se suponen adherentes placas pedriceras y culo espalda con palmas abiertas en la pared de la derecha.

Se sube razonablemente bien pero no hay forma de proteger.



Inicio de L2
Tras varios metros subiendo así (unos 5 o 6) decido colocar mi friend más grande el número 5. Respiro. Bufff.

Subo algo más y consigo moverlo por la fisura acompañándome pero al poco se ensancha y allí lo dejo porque no me quiero quedar a pelo.

Poco a poco
Unos metros más arriba intuyo una zona donde descansar y protegerme y cojo moral y sigo subiendo. Lo malo es que la fisura es profunda y conforme avanzo he de subir más alto para que me quepan las piernas en oposición, va quedando por debajo mí el supuesto refugio.



Siempre la misma postura, el friend del 5 se va quedando atrás
Ultima foto, luego se me deja de ver, arriba se intuye la zona de musgo que me encontraré
A unos diez metros de donde dejé el cinco intento colocar un microfriend (un 0,2) en una debilidad de una fisura poco profunda, tras probar de diversas formas lo dejo colocado sabiendo que tal vez soporte mi peso pero difícilmente una caída.

Lo tengo que colocar manteniendo la presión con los pies y bajando el brazo por debajo de los pies ya que la fisura queda por debajo mí y me resulta imposible bajar más debido a la estrechez (no cabe mi cuerpo pero es demasiado grande para cualquier friend).

Mientras tanto Oscar me ayuda lo que puede quitando hierro al asunto, animándome, dándome moral pero poco más puede hacer.

Luego me confesó que calculaba como esconderse si me caía para evitar que mi cuerpo impactara con el suyo cerca de veinte metros más abajo.

Tras colocar el seguro psicológico viene lo peor. En el lado donde apoyo los pies en los próximos metros hay musgo y luego el musgo pasa al lado izquierdo el de la espalda.

Durante todo el largo me sostengo por la presión de los pies y la fuerza de las piernas y aunque la adrenalina intenta evitarlo las piernas empiezan a dar alguna señal de fatiga.

Limpio como puedo con la mano las zonas de musgo donde preveo que voy a apoyar los pies. Al quitar el musgo se queda una mezcla de granito y de tierrilla polvorienta que no consigo quitar.

La suerte está echada, no me debo caer, no me puedo caer, no puedo retroceder y he de seguir avanzando.

Dos ideas cruzan por mi cabeza antes de decidir seguir avanzando. La primera coger el friend más grande y tirarlo fisura abajo confiando en que el fondo de la fisura se quede enganchado. Buffff debo estar muy desesperado para pensar que eso funciona.

Decido no hacerlo, la fisura es limpia sin angulos y ancha y en la vida he probado algo así. Respiro.

La segunda idea es si caigo tratar de incrustarme como un fisurero en la fisura si funciona sé que me tendrán que sacar con cuerda desde arriba y tirando de mí. Tampoco me convence pero no desecho la idea, la guardo por si acaso, antes de caer prefiero eso aunque si caigo no creo que me dé tiempo a meterme dentro.

Respiro y decido seguir, oigo mi respiración descontrolada, también la oye Oscar ahí abajo, avanzo con decisión, es el tramo más difícil y encima con musgo, avanzo bloqueo como puedo quito musgo para los siguientes pies y avanzo, mi respiración es muy fuerte. En algún movimiento he notado que he estado cerca de caer.

Pruebo de meter el cuatro y medio... todavía demasiado ancho, doy dos pasos más, el último friend de garantías a 20 metros... pruebo a colocar de nuevo el cuatro y medio y ahora si, SI, se queda, regular pero se queda.

Doy otro paso, lo subo por la fisura y lo recoloco, ahora sí, ahora apoyan bien las cuatro levas y paso la cuerda....

Cuando paso una cuerda le oigo decir a Oscar, "ese movimiento de cuerda! ¿has chapado algo?"

Bufffff, respiro, respiro, respiro y le digo que sí.

Las piernas arden y me quedan escasos cuatro metros para alcanzar los últimos metros donde se ven varios buenos emplazamientos para friends.

Sigue difícil y no me quiero caer, no me voy a caer, pero al menos la tensión no es la misma.

Aprieto dientes y sigo, cuando por fin coloco a muerte un friend del 2 en una fisura clara la película cambia. Queda un pasito para llegar a la reunión a montar tres metros más arriba y no me corto y coloco dos friends más, las ganas que tenía de meter algo!.

Monto reunión en una repisa cómoda con un camalot del cuatro y un par pequeños en fisuras perfectas, reunión segura.

Sube Oscar, alucinando con la exposición del largo combinado con una dificultad no despreciable que sin saber cual es estará en el V+/6a aderezado con tramo de musgo.

El tercer largo sin ser tan bravo tiene alguna zona de dar el callo y también sucia de musgo, afortunadamente no tan expo.
Terminando L3

Llegamos a un arbol. La fisura sigue un poco pero desploma y tiene musgo, eso no puede ser nada y rapelamos del arbol que tiene ya un cordino viejo.

Y esa es la Vía Rodolfo un postrecito de IV+ obligado inocente y ligero. Y ya tiene un aspa en mi libro de Verticualidad, tachado! y bien tachado!

Postdata: El miedo y las impresiones son algo relativo, subjetivo y personal. Esas fueron mis sensaciones, tal vez tu pases corriendo y te parezca fácil, pero más vale prevenir que curar.

Olga ha hecho un amigo

6 comentarios:

Oscar dijo...

No tenia que haber leido tu piada... acabo de revivir los momentos de asegurarte... con lo bien que estaba empezando a dormir de nuevo....jajaja.
Eres un Titan Chavi! Conozco a poca gente con tanta perseverancia y empeño en conseguir sus locuras!! Un placer como siempre acompañarte. Y recuerda que te queda por poner un aspa en la lista... aqui te esperamos!!

oscar dijo...

Se me ha quedao la boca seca, las piernas reventadas y las manos mojadas, gran relato, como siempre, se echaban de menos ya lo sabes. pero modérate que estas sesiones de literatura "climbing terror" no pueden ser buenas, eres un titán si señor...

mikel dijo...

je, je, parece que cuanto más putas te lo pasas, más vivas son tus sensaciones y mejor el relato, para nuestro placer. Sigue contándonos estas piadas, porfa.

Patxi Lasarte dijo...

Uff! Me sudan las manos!!! Vaya ambiente!

Xosé dijo...

Relato de terror, que eres padre de un montón de churumbeles.... he he, tenias que haber mandado a Oscar como en el espolón lunático!! la Rodolfo no la he hecho pero el espoloncito del Galvez te pone la cabeza en su sitio, he he, unos mákinaaaas!!!!

albertganxets dijo...

El auténtico terror habita en los quintos.

Conozco gente que ha pasado prueba, y ha volado, en sextos altos o séptimos.
En los cuartos y quintos no. -No conozco a ninguno ... ninguno sobrevivió.

Cúidate amic
un valenciano del Nord, un aragonés del Est

Óscar la próxima no le des cuerda más allá del camalot del 6