No suelo contar mucho de las vías de corte deportivo que escalo por la pedriza… pero he de reconocer que algunas tienen ese algo especial que las hacen diferentes.
Quizá sea por el entorno…quizá por su lejanía al coche... quizá por la gran belleza del paisaje donde se desarrollan… quizá por la tranquilidad y soledad que se respira raramente enturbiada por algún paseante… quizá por el incómodo estrés que generan aun siendo vías equipadas o quizá… sea la suma de toda estas razones las que hacen que ciertas vías tengan esa aureola de misticismo pedricero.
Pabellón de la verdetroncha y Complejo de lagartija son un claro ejemplo de esas rutas. Vías valientes que en su momento impusieron sus reglas y a día de hoy siguen manteniendo su esencia.
Reequipadas con parablot ofrecen una escalada segura no exenta de cierto compromiso pero siempre en el terreno más sencillo. Pasos obligados y de extremada belleza esperan a aquellos que se aventuren en sus placas. Descubrir sus sutiles regletas y dar con la secuencia de correctos movimientos nos harán pasar una jornada inolvidable.
¡¡¡Imprescindibles!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario