BALAITOUS POR LAS NEOUS



BALAITOUS POR LAS NÉOUS
Entrando en el glaciar de las Néous
Aunque con cierto retraso, nos sumamos a la tendencia iniciada por Chavi con su piada “blanca” ¡Que no todo va a ser roca en la vida del Caracol! Y como también es tendencia eso del coleccionismo (¡enhorabuena Oscar!) reseñamos aquí la Nº 21 de las “100 Mejores…” de Bellefon, ascensión que realizamos a primeros de Semana Santa.

Afortunadamente, las más pavorosas y comprometidas escaladas de “Las Cien” van quedando atrás… Eso supone que de vez en cuando podemos regalarnos con alguna ascensión más tranquila y relajada, ideal para compartirla con los amigos. Aunque ya sabemos que si está en la lista de Bellefon siempre será interesante y tendrá un inconfundible aroma a vieja escuela.
El refugio Ledormeur

La ascensión al Balaitous por el glaciar y la chimenea de las Néous es una de ellas. Llevábamos ya varios años con ganas de hincarle el diente, nos apetecía un montón recorrer en invierno esa vertiente que ya conocimos hace un par de veranos, pero la cosa se hacía complicada. Se trata de una actividad de dos días, y es bien sabido lo difícil que es para algunos caracoles librar más de un día… Además, si bien Bellefon la reseñaba como actividad estival, visto el cambio climático y el retroceso glaciar, parecía mucho más gozoso y entretenido plantearla como una ascensión con esquís. Pero esto supone otra dificultad, pues en la temporada invernal la carretera que lleva desde el Barrage de Tech, pasado Arrens, hasta el Plan d´Aste  (1470 m) suele estar cerrada, lo que añade 5 o 6 km más de calcetinada. Esta Semana Santa, con un buen anticiclón y sin riesgo de aludes, la carretera se encuentra ya sin nieve, pero en cambio se haya cerrada por obras entre semana. Menos mal que nosotros aparecemos un sábado. 
Amanece en la muralla de Costerillou

Estando limpia la carretera, es posible plantearse la actividad como una larga jornada de coche a coche, ligeritos de material ¿Pero como sustraerse a los placeres de un vivac en la montaña? Así que para nosotros, el objetivo del día es llegar al Ref Ledormeur (1917 m), ese vetusto, precioso y entrañable nido de águilas que conocimos en nuestra escalada a la Torre N de Costerillou. Porteamos los esquís en la mochila hasta poco después del Lac de Suyen, y poco antes de las 16:00 estamos en el refugio . Se trata de una antigua construcción con apenas 10 plazas, por lo que es recomendable no llegar muy tarde para coger sitio. La tarde es placentera, entre merendar al sol y cenar con el plumífero puesto se pasa en un pispás. Ponemos el despertador a las 5:30 h.
Sobre el glaciar

El segundo día tocará recorrer el glaciar de las Néous bajo la muralla de Costerillou, que luce soberbia tapizada de nieve y hielo. Lo que en verano eran unos escuálidos restos de heleros, presenta ahora un aspecto muy distinto bajo el manto invernal. Al fondo del valle se divisa la chimenea y el couloir que conducen a la cima. Es inconfundible, la segunda canal empezando por la dcha. En unas 4 h llegamos bajo la chimenea. Es vertiente Este, y el sol golpea con fuerza, pero el estrangulamiento aun está a la sombra. 
La chimenea es la 2ª canal por la dcha
Al parecer, las aglomeraciones y atascos son habituales en este recorrido, y también lo fueron ese día. La mayoría de los candidatos son más bien esquiadores, no demasiado duchos en estas lides e incluso sin material adecuado. Nosotros tuvimos la suerte de colarnos discreta y rápidamente. El resalte se ve bonito, una canal-helada, fácil de proteger con friends o fisus, e incluso con algún tornillo. Además, parece haber un spit. No hay demasiado hielo, pero la inclinación tampoco es excesiva: 5 o 6 m a 75-80. La verdad es que con dos piolets y crampones técnicos se trata de un paso bonito y sencillo. 

Amenaza atasco

Abriéndose paso.
Saliendo del resalte
A la salida del paso hay por lo menos un par de reuniones con pitones al lado izquierdo de la canal según se sube, y después proseguimos sin cuerda por un corredor de unos 45º con la huella perfectamente trazada. Hay más reuniones, pero no son necesarias con la nieve en buenas condiciones. 150 o 200 m de desnivel, y estamos en el trípode de la cima a eso de las 11:30. Destreparemos sin cuerda el corredor, hasta llegar a la reunión sobre el resalte. Un rápel de 30 m, y solo queda la esquiada hasta Ledormeur, y después lastrados con el saco hasta el fondo del valle, donde desaparece la nieve. Llegamos al coche a las 16:30, tras 11 h de actividad. 

En el corredor. Fijaros en las huellas de esquís, los hay valientes.

En cuanto al material, nosotros llevamos tres o cuatro expreses, algún fisu, aliens y camelot del 1 y 2, y fue más que suficiente. Usamos una cuerda de 60 para tres, y la parejita de piolets. Seguro que puede pasarse con menos, según en qué condiciones incluso sin cuerda, pero ya hay quien se da la vuelta por falta de material o de soltura, y es una pena… En resumen, una preciosa actividad muy recomendable, sin especiales dificultades, pero con ambiente.



Lasarte anaiak Pablorekin.  

1 comentario:

Anónimo dijo...

Escaladores románticos para los que el libro de Bellefon significa mucho.

Cuantos quedamos de esos? Estamos trasnochados, pasados de moda, chocheamos....

Lo cierto es que críticos de ese libro hay muchos, muchísimos pero siempre pasa lo mismo, los que critican este libro han hecho 10,15,20,30 de las clásicas buenas y conocidas por todosy 1, 2, 3 ó 5 de las raras, duras, expo, salvajes y no quieren hacer más.

Normalmente te gusta más aquello que te cuesta, que no es fácil, que exige darlo todo y este librito de Bellefon esconde en números no muy altos muchas aventuras con mayúsculas.

Enhorabuena Lasartes!

Un pirineista romántico que disfrutó con vosotros de la Norte del Pic Long.