Midi D’Ossau, paredes para disfrutar



Julio de 2015
Suli, Edu y Lorenzo

Que escalar en el Midi es un placer es una obviedad y no descubro nada nuevo. Todos los años me propongo hacer alguna vía en estas paredes únicas, lástima que hace días que alcancé mi nivel de incompetencia y ya he repetido varias veces todas las vías por las que puedo subir con cierta dignidad. Pero no me importa nada volver a escalarlas y disfrutar de este armonioso paisaje que tanta paz me transmite.
Quedamos con Suli para escalar la Surplombs en la cara sur de la Jean Santé.
Suli, que hace no tanto era un avezado alpinista, se abandonó en los últimos años a la “deportiva”, y a otras cosas, que Suli siempre pone toda la pasión en lo que hace, y recientemente le está volviendo a coger gusto a la “Big wall”, una manera hortera de llamar a las escaladas de más de un largo, así que acepté encantado cuando me propuso ir al Midí, al Los Desplomes, una clásica y una de las vías que más me gustan de las que yo he escalado allí.
Magnífico segundo lardo de la Desplomes
Comenzando el tercer largo. Fisuras para disfrutar.
Y a pesar de conocerla me volví a perder, una vez más, y eso que íbamos con la reseña de Luichy, pero claro, por muy buena que sea la reseña, si no la miras de vez en cuando.... La cosa no fue a peores y Suli pudo retomar la vía al módico precio de un fisurero que tuvo que abandonar. Y también a renunciar a continuar por la Super Joli porque el embarque no hizo perder bastante tiempo. 
Por aquí ya andábamos despistados, aunque no mucho.
Suli de nuevo en la vía.
Pero nada de esto impidió que disfrutáramos de las excelentes fisuras y placas del Midi que nunca defraudan. Bajamos por los rápeles del Circo Gris, la forma más cómoda de llegar al suelo, justo a pie de vía (recomendable llevar navaja y cordinos para cambiar alguno que no inspire demasiada confianza).

Y disfrutamos tanto que volvimos a quedar de nuevo para escalar la Cara Este del Dedo de Pombie que Suli no conocía. A esta excursión se apuntó Edu, que este día le tocaba “reposo activo” y que tampoco conocía esta superclásica superaconsejable, fácil de seguir (de nuevo con la reseña de Luichy, ver en La Noche del Loro). Y para la bajada, también muy recomendable llevar la reseña de los rápeles que Luichy tiene en su página y así… sin problemas (mucho cuidado con las piedras).
Cuando lo ves hacer parece fácil, pero.... Edu en el segundo largo de la Cara Este del Dedo
Suli en la primera parte de la Cara Este del Dedo, tercer largo
Como la vía ya la había escalado anteriormente en un par de ocasiones, cedí los largos más chulos a mis compañeros para que los disfrutaran, yo seguro que los hubiera escalado guarreando,  y así, con la cuerda por arriba pude esforzarme en intentar subir en libre estos magníficos diedros, sólo intentar ¡eh!, a ver si a estas alturas vamos a perder la sana costumbre de agarrar la cinta en caso de apuro, que para eso somos alpinistas.
La rica niebla, fresquito de agradecer al comienzo de la segunda parte de la Este del Dedo, largos perdedores después del jardín.
Este día disfrutamos de una niebla francesa que nos alivió del calor sofocante de la vertiente española. Y como siempre, volvimos a casa con ganas renovadas de volver a escalare y con un montón de proyectos para rellenar la ya gorda carpeta de “asuntos pendientes”.
Magníficos diedros de la parte superior del la Este del Dedo


Apretando en las babaresas. Canto con encanto.
En la cima del Dedo con cara de estar disfrutado
Lorenzo 

1 comentario:

Alberto dijo...

Lorenzo, veo que te sienta muy bien el "cambio de trabajo". Me alegro y a ver si coincidimos este verano.

Alberto