Quinto Menguante, Apia y Santiago Rodolfo. Pedriza.

De nuevo, otro buen fin de semana de escaladas clásicas en Pedriza. Esta vez el sábado  Olga y Yo, nos decidimos a explorar por la zona de la Cueva la Mora, que no lo conocíamos y las temperaturas eran fresquitas. El domingo lo dejamos para Dos Torres, donde nos acompañaría nuestro amigo Márquez.

Escalando en la Cueva la Mora, el Camello justo detrás.

Quinto Menguante en la Cueva la Mora.

Clásica del sector y otra de las imprescindibles en la Pedriza...o eso tengo entendido.

Nos gustó bastante. Un primer largo técnico en un diedro inclinado, donde hay que protegerse algún tramo, da paso a una gran placa que pondrá a prueba nuestra destreza en adherencia. Lo más difícil está perfectamente protegido con parabolts. Y donde es más fácil, pues lo que estoy viendo ya casi normal aquí en la pedriza... no te pongas nervioso y confía... es difícil caerse, pero como decidas hacerlo donde no debes; puedes cantar la tabla del 7 que es de las difíciles, enterita hasta que te pare el compañero... 7×1=7, 7×2=14......

Primer largo de Quinto Menguante.

 

Visto desde arriba...



Confía...

Vía Apia al Camello.

Singular risco, bastante vertical.

La vía es otra de esas clásicas  que de vez en cuando es escalada en libre. También digo que subir encadenando a vista y protegiendo, lo vi bastante difícil, sinceramente creo que está reservado a unos pocos virtuosos...



Via Apia, Camello.

Un juego de camalots y aliens repitiendo verde y amarillo y sin olvidar los fisus...imprescindible si vas en A1+. Hasta 7a que dicen que sale en libre uno ya va viendo lo que quiere o puede escalar...

Olguita recuperando el largo.

En las setas del muro, llegando a la R.

Vistas desde el Camello, detrás las placas de la Cueva la Mora.

 

El ultimo largo es anecdótico y por decir me he subido a la cima... los tres buriles están sin chapa y dan paso a un parabolt. El rapel (dos cáncamos buenos) está más adelante, que es la reunión de otras vías antiguas.

Santiago Rodolfo. Dos Torres.

La tenía en mi lista de pendientes, pues en una ocasión, me toco destreparme el primer largo enterito. Aquella vez que fui, todavía andaba un pajaruelo por el nido de la primera reunión y decidí no molestarle...eso sí, ambos nos pegamos un buen susto al mirarnos fijamente con cara de espanto a escaso metro y medio.

En el primer largo de la Santiago Rodolfo.

Esta vez, todos los buitres que nos observaban en la aproximación, se cambiaron de risco al llegar nosotros a la base de la pared.

Fui con la reseña de vía clásica pdf junto el relato de los aperturistas y reaperturistas...
Los dos primeros largos me parecieron bien buenos...Dos fisuras perfectas donde poner en practica nuestra técnica de empotres de puños y manos. Sinceramente llegue a la primera reunión restallado...ojo con la llegada a la repisa si vas sin colgar, cuando crees q ya tienes todo hecho, aun te quedan un par de cerrojos de pies y manos que le dan el grado al largo. (Como dice un amigo mío...toca poner mirada del tigre y apretar las manos...aunque nos duelan) El segundo largo tampoco es fácil...y hay que usar de nuevo bien los guantes y aguantar el dolor de pies en los cerrojos.

Asegurando desde R2, Sinceramente no se muy bien, que hace Márquez, yo miro el musgo de lo que viene despues...

En A1 con los cacharros de ahora estos dos largos no tienen pinta de tener mucho problema, pues el material queda a "Cholón"...que viene a decir... como marcan las instrucciones.

Asegurando desde R3.

Márquez recuperando el tercer largo.

La mirada del Tigre!!!

 

Tercer largo. Ojo que aquí salí de la R. por la derecha más pancho que pancho...y estuve más de un cuarto de hora que sí, que no, cepillando un pie... ahora una mano. Ahora otro pie....madre... madre que no lo veo... (Incluso llegue a plantearme por un instante abandonar en este punto).

Para al final, acabar subiéndome a los hombros de Márquez y hacerlo por la izquierda como al parecer cuentan los aperturistas que hicieron. Con más miedo que vergüenza conseguí cogerme a una chorrea musgosa para con mucha cautela y pasos delicados y más miedo a tope claro...pues el musgo tiene un grosor considerable... llegar al diedro sin resbalarme.

Mi sorpresa fue al día siguiente cotilleando por la red, ver otro croquis donde marca un parabolt que protege la placa...o cada vez estamos más cegaratos...o el musgo se la ha zampado...o hay ya no hay chapa ni chapo...ojo con esa salida de reunión que no es fácil y vas a la repisa de cabeza... sinceramente un expansivo ahí no creo que este de más...pero bueno…  bien es cierto que al parecer se abrió sin él. Y a lo mejor alguien con criterio y potestad extractora ha decidido quitarlo. Insisto que ha día de hoy, ahí no vimos nada que protegiera la placa y esto le da compromiso al largo.

 

Reseña y descripción de la Santiago Rodolfo.Dos torres

Reseñas, Santiago Rodolfo.

Al final del mismo tras apretar un poco los dientes encontraremos la tercera reunión, está ya si, rapelable y de dos paraboles...

Un largo más,  bien bonito en chimenea nos deja en una bonita cima donde tampoco vimos ninguna reunión de chapas...tampoco me moleste mucho en buscar la verdad, me fui a la última de la Tino y ya rapelar al suelo desde allí que era terreno conocido.

De material conviene repetir 1, 2,3 y el 4 no está de más...aunque puedes ir corriendo las otras tallas...para la primera fisura hablo...el resto de largos no hace falta repetirlos.

Buen día de escalada que nos dejó más que satisfechos...

Saludos y buenas escaladas!!

 

Acualización de la entrada a 14/10/2015.

Actualizo la entrada anexando el texto escrito por de Santiago Hernandez, el cual me ha pedido por favor si podía dar su opinión referente a la vía.

Hola Oscar,

Soy Santiago Hernández aperturista junto con Rodolfo Assas de esta vía. Me alegro mucho que la hayáis disfrutado y os felicito por la motivación que tenéis por la Pedriza.

La decisión de quitar el parabolt del tercer largo fue en base a las siguientes reflexiones:

Se trata de una vía de corte totalmente clásico, equipada con dos parboles M-10 inox en todas las reuniones.

Esa tirada es también un largo importante de la vía, tanto como lo puedan ser el primero y el segundo, principalmente por el compromiso que tiene. Ha pasado mucho tiempo desde que se abrió y es muy lógico que la vía haya tenido su evolución; quiero decir que yo nunca he estado en contra de actualizarla (aún a pesar de que también hubo algún desacuerdo).

Desde luego, si iniciamos este largo con un paso de hombros, en caso de caída bien podemos aterrizar en la rampa que hay a la izda de la reu con el consiguiente peligro de lesión. Aunque se abriera así, no es aconsejable hacerlo como tú bien sabes. En 2009 estuve con “Peli” (David Suela) limpiando el 3º largo tanto por la variante como por la original, solo que al estar montada la R-2 con los dos parabolts tan cerca de donde la hicimos Rodolfo y yo, como es lógico modifiqué como un metro a la dcha el largo original para salir desde esa reu, tal y como explico con detalle en el pdf de Víaclásica.

Joaquín y Dani colocaron ese parabol en la placa, sin duda era justificado pues iban desde abajo y tenía musgo. Éste, es diferente del de la placa original de la izda pues en ella es blando y grueso mientras que el tramo donde pusieron el parabol, el musgo era seco y menos grueso.

La distancia que hay desde los parabolts de la reu, hasta que llegas a alcanzar la grieta horizontal del bloque donde metes el primer friend, no es mucha. Hay que tener en cuenta que te metes a la placa por la dcha de la reu, subes un poco por cantos pequeños que aparecieron después de cepillarla y lo difícil, creo recordar, son dos movimientos de adherencia que te dejan en un sitio muy cómodo y desde donde llegas a dicha grieta; el friend entra a capón. La dificultad de esos dos movimientos será de V (o quizás V+ en una graduación mas moderna), pero mas o menos. Si te caes de primero sin parabol, lo mas probable es que sea en ese sitio, y si bien es cierto que la distancia a la reu aleja lo suficiente como para darte un poco de “cangui”, la supuesta caída (unos 4 o 5m) sería bastante asumible. Estarías un poco a la dcha de la vertical de la reu con lo que desde luego, deberías tener la cuerda por tu izda; caerías el primer tramo corto y mas vertical, después, desde el nivel de la reu para abajo, la placa va tumbando de forma progresiva a modo de tobogán y tapizada de musgo blando y grueso.

Como dice Peli en su comentario, antes de tomar la decisión de quitar la chapa escalé la placa hasta la grieta horizontal del bloque y la volví a destrepar, lo hice sin utilizar el parabolt pues quería hacerme una idea de cómo sería sin la chapa.

El musgo es un inconveniente en estas vías poco hechas por lo que, mientras no se repitan mucho, necesitarán un repaso cada cierto tiempo. Si la placa se ensucia se puede limpiar, bien rapelando desde arriba o incluso yendo de primero con un cepillo, ya que no te tienes que parar a cepillar en ninguno de los movimientos mas difíciles.

De esta forma la vía original no se ve afectada por la variante abierta pues si mantenemos la chapa, el valor, carácter, y la psicología de esta tirada se queda reducido a una caricatura de lo que era. Por corta y modesta que sea la pared, no es una vía de deportiva y la experiencia y satisfacción que te aporta cuando superas pasajes de este tipo con riesgo controlado, no te la da con una chapa al lado, ya que con ésta, la actividad se reduce a un ejercicio gimnástico; la aventura queda excluida.

Durante la apertura con Rodolfo metimos un buril en el primer largo, entonces lo consideramos necesario. En 2009 lo quitamos, con la evolución del material ya no lo es. Con el paso del tiempo las circunstancias van cambiando y muchas vías se ven afectadas por este y otro tipo de cosas. Creo que el único camino que conduce a algo positivo es el dialogo y entendimiento entre las personas interesadas, fuera de polémicas. También que estoy obligado a escuchar y esforzarme por comprender a las generaciones mas jóvenes que la mía, siempre y cuando estén dispuestas a dialogar, pero de igual manera, éstas están obligadas a respetar a la gente que les han precedido ya que han construido sobre la experiencia de ellas, y a esforzarse por comprenderlas, por eso ambas partes deben ceder. Además de esto, la gente que viene detrás de nosotros tiene derecho a conocer la historia tal y como ocurrió, relatada con una honestidad fuera de toda duda, y los escaladores presentes tenemos la obligación de preservar lo que tenemos intentando dejar la menor huella posible de nuestro paso.

Un saludo.

Santiago Hernández